Instrumentos
Musicales Criollos
El instrumento criollo
tiene su origen en el aporte europeo. Desde los primeros años de
la colonización fueron introducidos en las colonias, muy
especialmente como elementos básicos para la institución de
escuelas de canto y música, (centros organizados por religiosos
para la integración del indígena al nuevo orden social); debiéndose
también considerar los instrumentos que espontáneamente
conquistadores y colonizadores incluyeron en sus equipos para
afincarse en las nuevas tierras.
Unos y otros pasaron al dominio interpretativo del indígena, y más
tarde del hombre de campo.
El origen de los diversos instrumentos ha incidido sensiblemente
en su localización geográfica de uso, como consecuencia natural
de la radicación de sus intérpretes y fabricantes, coincidiendo
con cierta relatividad con la ubicación de las reducciones y
zonas de influencias colonizadoras. Otros fueron proyectados
en forma progresiva, ampliando sensiblemente la región de uso,
arrastrados por la suerte de melodías interpretadas en ellos, o
como, en el caso de la guitarra que ha cubierto prácticamente
todo el territorio nacional.
Acordeón:
Aerófono moderno que ha sustituido en forma paulatina al arpa y
al violín anexándose al bombo o a la guitarra como base de
acompañamiento de los bailes, en casi todo el país. Está
provisto de un fuelle y un pequeño teclado, existiendo una
infinidad de variedades.
Anata:
Aerófono de origen Boliviano, de escasísima dispersión en
territorio argentino. Se han mantenido fiel a su origen y uso
Jujuy y Salta.
Se trata de un cilindro de madera blanda, de un largo oscilante
entre los 25 y 60 centímetros, con una delgada perforación
longitudinal, en contra posición con las gruesas paredes. A
partir del punto medio de su longitud total comienzan las
perforaciones para regular los sonidos.
Es un instrumento típico de verano que sigue siendo un medio de
traducción de temas indígenas, especialmente en el carnaval.
Arpa:
Cordófono de forma sensiblemente triangular y que se ejecuta
con ambas manos. El arpa criolla no es más que un derivado del
arpa Europea habiendo arraigado profundamente en todo el
continente americano en el siglo XIX. Su mayor difusión la tuvo,
y aún resiste airosamente, en las provincias de Corrientes,
Salta, Tucumán, Santiago del Estero y Catamarca. Es un
instrumento de tradición aristocrática.
Bombo:
Membranófonos como la caja, en él se produce el sonido por
golpe de palillos o mazos que hacen vibrar el cuero tenso ajustado
al cuerpo del instrumento. Es típico de todo el noroeste
argentino ( Salta, Jujuy, San Juan y Santiago del Estero ). Consta
de una caja cilíndrica de madera de 50 o 60 cms. de alto, en
cuyos extremos van ajustados, por aros, dos parches de cuero
de oveja, cabra o cordero.
Caja:
Membranófonos que produce el sonido o ruido por la vibración de
cueros o membranas rígidamente estirados.
Es característico de todo el norte argentino, reconoce como
antecesor al tambor aborigen, y su amplia dispersión cubre una
zona geográfica notable. Fuera de La Rioja donde se le denomina
tambor, y de Jujuy donde frecuentemente se usa el nombre quichua
"tinya".
En el noroeste de San Juan hasta Jujuy, incluyendo Tucumán,
Santiago de Estero y Chaco, no conoce otro denominativo que el muy
usado de "caja".
El cuerpo del instrumento está constituido por un aro de madera
regional, cuyo diámetro oscila entre 20 y 40 centímetros, de
altura variable. Sus dos extremos van cubiertos de cueros ( oveja,
cabra o cordero ).
Charango:
Cordófono con forma de guitarrilla criolla descendiente
de la europea, típica de Salta y Jujuy.
Su uso en la
Argentina parece ser posterior a su auge en Perú y Bolivia y
puede considerarse como una influencia ejercida por los Bolivianos
sobre esa cuña geográfica de dispersión que va atenuándose en
Salta.
Consta el
encordado de cinco pares de cuerda con características similares
a la guitarra en lo referente al clavijero, mango, puente, etc,
pero con la peculiaridad de que la caja de resonancia está hecha
con la caparazón de armadillo o tatú disecado.
Indios, mestizos
y criollos interpretan en él melodías características, tales
como bailecitos, carnavalitos, huainitos, huainos, y melodías
pentatónicas puras.
Erke:
Del grupo de los aerófonos es un
gigantesco instrumento de origen incierto, llegado al norte
argentino desde Bolivia. El tubo conductor del aire, de tres a
cinco metros de longitud se construye con trozas de cañas hábilmente
unidos, presente en uno de sus extremos un agujero transversal
para el soplo, y en el otro un pabellón de cuero, cuerno o latón.
Exige una
habilidad muy particular para sostenerlo durante la ejecución, generalmente orientando hacia el cielo el pabellón lo que
equilibra el peso .
Sus sonidos se
asemejan a un lamento lejano, que al decir de los indígenas, atrae las heladas,
por ello jamás se lo oye en verano o
primavera ; es instrumento de otoño e invierno, que acompaña las
procesiones especialmente después de carnaval y preferentemente
en corpus christi, hasta el día de todos los santos.
Erkencho: Similar al anterior, pero de reducidas proporciones.
Se trata de un clarinete rústico compuesto de dos piezas, una
boquilla de caña de diez a doce centímetros de longitud, con
una lengüeta y un pabellón (cuerno ) que amplifica el sonido .
Tradicionalmente
se los acompaña con golpes de caja que el mismo ejecutante de
erkencho tañe con la mano derecha.
Instrumento de
verano, entra en vigencia exactamente en el lapso que se silencia
el erke oyéndoselo en la serranías jujeñas desde el día de
todos los santos hasta carnaval.
Flauta
Tucumana:
Según
Carlos Vega es este el único aerófono criollo tradicionalmente
de la Argentina, y que los músicos mismos lo construyen en la
región para su propio regalo .Construida típicamente con una caña
de casi treinta y cinco centímetros de largo y dos de diámetro, presenta la particularidad de un cambio de materia prima en la
zona precordillerana, donde se emplean los huesos largos del ala
del cóndor.
La música típica
de este instrumento es netamente religiosa.
Guitarra:
Instrumento musical cordófono, de
seis cuerdas que se a difundido extraordinariamente en el país y
en otros países de América desde la llegada de los españoles .
Ha sido la compañera inseparable del gaucho. No podría
clasificarse como instrumento folklórico dado que las que se usan
en la mayor parte de nuestro país son de fabricación comercial y
no regional.
Compañera
constante del payador, personaje legendario del gaucho, improvisadores que empiezan a figurar en 1778.
El gaucho halló
un solo instrumento musical capaz de traducir los sentimientos
hondos, sencillos y dulces de su alma soñadora y poética : la
guitarra.
Pinkillo: Instrumento de verano, denominado también talka es una pequeña flauta de caña,
sin
nudos, de unos treinta centímetros de largo, por tres de
diámetro, ahuecada, que presenta perforaciones similares a la flauta
Tucumana y a la quena.
Quena:
Instrumento americano de amplia difusión
geográfica en el ángulo noroeste argentino. Vigente su uso en la
actualidad, es empleada típicamente en verano, lo que no
excluye su práctica durante otras épocas del año, pero siempre
utilizada por los hombres.
La quena, que
los indios construyeron en hueso, caña y barro cocido, y que
hoy se hace exclusivamente de una caña llamada chuqui, es aimará
; es el instrumento representativo de la música incaica, uno de
los más antiguos y el más característico de la razas quichua y
aimará
Sobre su origen
se han formulado muvhas leyendas indígenas, pero todas carentes
de certeza.
Su longitud varia
entre los treinta y cinco y setenta centímetros y las dimensiones
y el numero de agujeros dan el carácter a la música que ellas
producen.
Se dividen en
varias especies según el destino que se les de. Así existen la
de tratripuli, de sonido fresco, dulce y alegre, manteniendo un
ritmo vivo ; la de choquela de sonido más áspero y la de quena
– quena de sonido más rudo, que se utiliza para acompañar a
los bailes del mismo nombre, las que también se conocen con los
nombres de quena, quenacho y quenali.
Siku:
El siku, que en quichua se conoce con
el nombre de antara, es otro de los instrumentos preferidos por
los nativos del altiplano, que poseen una gran variedad de estas
siringas o flautas de pan incaicas. Se construye con una sucesión
de cañas cortadas de mayor a menor y unidas entre sí por medio
de ataduras. Su sonido es alegre y animado y los ejecutantes, mientras lo sostienen y manejan con una mano se acompañan con la
otra en el bombo .
Vigente en Jujuy
y en el norte de Salta su uso no tiene especificación en ninguna
época del año; constituye el típico acompañamiento de
ceremonias religiosas.
Tamboril:
Variante regional del bombo, su
característica reside en su menor tamaño, lo que permitec colgarlo por medio de un tiento de la muñeca izquierda.
Tradicionalmente
su precisión acompaña a las procesiones en diversas provincias
norteñas.
Triángulo:
Idiófono integrante de los conjuntos
instrumentales cultos contemporáneo argentino en la interpretación
de danzas, como elemento de apoyo de la percusión rítmica .
Varilla metálica
doblada en forma de triángulo que se pone en vibración al ser
percutida por una baqueta del mismo metal, es una modificación
del sistro.
El sistro fue el
instrumento sagrado de los egipcios y constaba de un armazón de
metal con mango.
Trutruka:
Trompeta gigante de origen araucano,
tiene características que recuerdan al erke; consta de un largo
tubo, de dos a seis metros, de madera, ahuecado, y un pabellón
que aumenta la sonoridad, de cuerno .
Dada su dimensión
el intérprete apoya el extremo en cualquier objeto de un metro de
altura, siendo típico oírlo en la ceremonia funerarias.
Pertenece a la zona de Neuquén y Río Negro, originariamente ha
ascendido al noroeste.
Violín: Cordófono especializado en el arte de ejecutar músicas clásicas. Vigente a través de mas de tres siglos, está siendo
sustituido en la actualidad, por el acordeón.
En el conjunto
instrumental, su acción es importante y transmite con
autenticidad la expresión de músicas bailables tales como la
zamba. Pertenece a la zona de Tucumán con proyecciones y
retransmisión en Santiago del Estero.