Meteorismo o empaste
Algunas técnicas de prevención
El meteorismo espumoso de los rumiantes, en
pastores de leguminosas, es un disturbio digestivo que consiste en la
formación de pequeñas burbujas que retienen gases producidos por la
fermentación ruminal, impidiendo su eliminación por eructación.
Los factores de riesgo están ligados a:
A
la pastura: Teniendo en cuenta el estado fenológico, la composición
química y la especie de leguminosa que participa.
A las
condiciones ambientales, en donde temperaturas en la etapa de
crecimiento del forraje dentro de un rango de 18 a 26 grados, aumentan el
potencial meteorizante de las leguminosas. Días con gran amplitud térmica,
producto de noches frescas y días calurosos aumentan el riesgo de empaste, al
igual que el forraje afectado por rocío, o inmediatamente después de una
helada.
En relación al animal, se pueden citar la
heredabilidad de susceptibilidad al empaste, el comportamiento diferencial
según razas, el volumen y composición del contenido ruminal.
Medidas preventivas: No existe una
única solución a la problemática del timpanismo, por el contrario se
mencionan varias prácticas que, utilizadas en forma coordinada, disminuyen
considerablemente los índices de mortandad durante los períodos de alto
riego de ocurrencia.
Algunas prácticas son: Las asociación de
leguminosas con gramíneas, prácticas de manejo relacionadas a la madurez
fisiológica de la pastura y el ingreso de los animales de manera de no
hacerlo en forma anticipada ni con forraje demasiado pasado. El aporte del
suplemento con heno en los últimos días de pastoreo de las parcelas, al
igual en los períodos en los que los animales son retirados preventivamente
de las pasturas, y evitar el ingreso en las parcelas con animales demasiado
hambreados.
Debe extremarse el control en los cambios de
animales en las parcelas posteriores a las lluvias o cuando hay condiciones
para el rápido crecimiento de la pastura, se sugiere además hacer los
cambios luego que el rocío ha desaparecido, como así también mantener los
animales en movimiento y bajo observación durante las primeras horas del
nuevo pastoreo.
La utilización de agentes tensioactivos y
antiespumantes, que ejercen una acción directa sobre la formación y
estabilidad de la espuma ruminal, es una práctica difundida además del uso
de antibióticos como la Nomensina que actúa sobre la flora ruminal
modificando la fermentación, ésta es una práctica reciente que disminuye
hasta un 80 % la incidencia del meteorismo.
Por último otra práctica utilizada es el
marchitamiento del forraje, cuyo efecto se puede lograr mediante
procedimientos físicos tales como el corte de forraje 24 o 48 horas antes de
ser consumido o mediante procedimientos químicos como el uso de herbicidas (Paraquat)
de contacto que ajustados a algunos aspectos necesarios al momento de su
aplicación ejercen un efecto sobre el tercio superior de los tallos de
leguminosas, que permiten tener bajo total control el meteorismo.
Infortambo
Otros artículos de interés
Composición
de la leche y Valor Nutritivo
Digestión en la Vaca Lechera
Informe lechero
Lactancia y Ordeñe
Leucosis Enzoótica bovina
La Máquina de Ordeñe
Calostrado
Estructura de la Glándula Mamaria
Ganadería