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Como ahorrar dinero en gasoil

1 - Comprar gas oil de calidad verificada 
Cuando se piensa en gasoil de calidad, automáticamente se asocia al más caro, pero esto no siempre es así. En la compra de partidas importantes puede ser conveniente realizar un análisis de laboratorio. Son notorias las diferencias que se observan en partidas sucesivas del mismo proveedor, lo que indicaría que los combustibles podrían tener distintos orígenes. 

En el gasoil se aplica, como en pocos casos, que lo barato sale caro, ya que las consecuencias de un combustible malo sobre los componentes del sistema de inyección son nefastas, llegando a obturar inyectores, dañar bombas y afectar la performance del motor. Es hora de que se comience a pagar el combustible sólo cuando los análisis demuestren que cumple con las especificaciones mínimas que debe reunir un gasoil de calidad.

2. Evitar pérdidas durante el almacenamiento 
Cuando se almacena el gasoil en tanques aéreos es común que se produzca evaporación, sobre todo si están pintados de colores oscuros que absorben más calor. La pérdida puede llegar a 360 litros mensuales en un tanque de 10.000 litros. 
Pero no sólo es importante la cantidad que se evapora sino su calidad, ya que los compuestos que se vaporizan son aquellos que son más volátiles, que tienen un rol importante para el arranque del motor en frío. La ausencia de estos compuestos livianos hará más dificultoso el arranque en frío y provocará un mayor lavado de los cilindros y carbonización durante el calentamiento del motor. 

Además, la excesiva temperatura favorece la formación de lacas y barros que luego obstruirán los filtros del tractor. Por ello, estos depósitos deben estar pintados de colores claros o estar protegidos por algún tipo de sombra o techo. 

3. Llevar un registro detallada del uso del gasoil 
El solo hecho de comenzar a registrar el consumo de gasoil en el detalle suele provocar una disminución de consumo sorprendente. Esto es muy sencillo, porque se dispone de medidores de gasoil muy económicos e incluso tanques de almacenamiento con bombas, filtros, niveles y canillas de purga incorporados. 

El otro aspecto importante que surge al llevar un registro del consumo de gasoil es poder calcular los costos operativos de los distintos equipos, incluidas las camionetas y vehículos de transporte. 

4. Lastrar adecuadamente el tractor 
Es muy frecuente encontrar tractores mal lastrados, ya que no siempre se tiene en cuenta el tipo de labor que deberá desempeñar. Todos los kilos de más que transporta el tractor por el lote originan un consumo de gasoil innecesario y una compactación no deseada. 
Es por ello que se debe llevar el tractor al nivel de lastrado mínimo que permita realizar la labor de mayor esfuerzo de tracción con niveles de patinamiento razonables. Tampoco debe subestimarse la importancia de una distribución apropiada de pesos, habiendo importantes diferencias entre simple tracción, doble tracción y equipos articulados. 

5. Controlar las presiones de inflado del tractor 
Es muy común que se le preste muy poca atención a este detalle, pero se debe recordar que los neumáticos son los responsables de transmitir toda la potencia del tractor  al suelo, por eso una mala calibración de los mismos traerá aparejada una pérdida de potencia útil y un consumo excesivo de gasoil. 
Las diferencias medidas a campo son de tal magnitud que si se trasladaran a un auto de calle equivaldrían a tener una rueda con 10 libras por pulgada cuadrada, otra con 30 y la tercera con 60. Presiones excesivas favorecen el patinamiento y la compactación; las muy bajas incrementan el esfuerzo de rodadura y favorecen las roturas de los neumáticos. 

6. Optimizar el estado, enganche y armonización de los equipos de labranza 
La optimización del conjunto tractor-apero es de vital importancia para aprovechar la potencia disponible en el tractor. Debe tenerse en cuenta que no todos los tractores son iguales; existen tipos o categorías de tractores muy distintos. Aun a igualdad de potencia en el motor, tienen distinto comportamiento a campo. Un caballo percherón y un cuarto de milla no dejan de ser caballos, pero evidentemente son distintos-, lo mismo ocurre en los tractores, no se le pueden poner los aperos de un tractor percherón a un tractor cuarto de milla. 
Una geometría de enganche adecuada, el buen estado de conservación de la herramienta y su dimensionamiento adecuado pueden llegar a ahorrar un 30% de gasoil por hectárea. 

7. Mantenimiento del sistema de inyección 
La puesta a punto de la bomba inyectara tiene gran influencia sobre la perfomance del motor; un atraso excesivo hará que el motor queme mal, entregue menos potencia, caliente y carbonice más de lo normal. En cambio, demasiado avance provoca un arranque más difícil, golpeteos en el pistón, probabilidades de roturas y mayor gasto de combustible. 

Inyectores en mal estado pueden provocar goteo, con la consecuencia de una mala combustión; las toberas gastadas dan lugar a una mala atomización del combustible y su quemado incompleto. 
Gasoil de calidad, filtros adecuados y una limpieza escrupulosa de los elementos del sistema garantizarán un ahorro importante de combustible y un funcionamiento libre de sorpresas. 

8. Utilizar el motor en regímenes adecuados a la labor 
Todos los motores tienen un régimen donde el consumo específico se hace mínimo. Esto significa que a ese régimen se logra la mejor conversión posible entre el gasoil consumido y el trabajo entregado. Normalmente este régimen coincide con el de máximo por motor y suele estar indicado en las especificaciones de los motores. En la mayoría de los motores agrícolas suele estar en el orden de los 1600/1800 RPM. Desde ya, no se dispone de la potencia plena del motor pero, para labores que no la demanden, es más lógico trabajar con el motor a estos valores. Por ejemplo, si se tiene que llevar un pulverizador a 10 kilómetros por hora se puede hacer en cuarta marcha a 2500 RPM o bien en sexta a 1700 RPM. En el segundo caso se gastará menos gasoil y no se carbonizará el motor. 

9. No siempre el tractor grande es el más gastador

Existe un cierto folclore alrededor de que un tractor grande siempre consume más que uno chico, y esto no siempre es así. Por ejemplo, si se debe realizar una labor que demande 50 HP se puede hacer con un tractor de 50 HP o con uno de 100. 

En el primer caso, se estará utilizando el tractor al régimen máximo, donde el consumo específico por HP entregado es alto. En cambio, el tractor de 100 HP se puede utilizar a un régimen muy bajo, tal vez 1400 RPM, donde el consumo específico será mucho más bajo. De esta forma se puede llegar a realizar la misma labor con menos consumo. Esto es así salvo que el terreno sea muy blando y el tractor más grande gaste mucho gasoil por el esfuerzo de rodadura adicional

10. Colocar filtros de aire adecuados y mantenerlos en buen estado 
Para que un motor aproveche todo el gasoil y lo queme correctamente necesita mucho aire, a razón de 6 millones de litros de aire por día. Sí, leyó bien, son seis millones de litros que deben pasar por el sistema de filtros de aire y llegar al motor sin el menor vestigio de polvo ni impurezas. Es por esta razón que un filtro de aire defectuoso, con menor área de filtrado que el original y con un papel de mala calidad, provocará su rápida saturación, con la consiguiente pérdida de potencia y elevado consumo de gasoil. 
Una limpieza periódica de los filtros y una verificación meticulosa evitará, también, que ante una rotura de los mismos ingresen al motor partículas de polvo que terminarán con su vida útil en corto plazo. 

La mayoría de estos consejos son tecnologías costo cero; sólo requieren de su instrumentación, complementándola con una formación de los tractoristas en la cultura del cuidado del gasoil, un recurso que históricamente fue barato, pero que difícilmente vuelva a serio.  

El autor es el Lic. Ricardo Martinez Peck. Consultor en Mecanización agrícola.Docente de la Universidad de Lomas de Zamora

 
 

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