Pinamar
Provincia de Buenos Aires
En medio
de las dunas, a 4 kilómetros del mar y a casi 8 del centro,
avanza la construcción de un coqueto edificio de madera. Allí,
en un paisaje digno del Sahara al que sólo se accede en
camionetas de doble tracción o en cuatriciclo, funcionará en el
verano un parador con restaurante que promete ser una de las
atracciones de la temporada en este balneario.
La
apuesta fuerte de Pinamar en el 2000: el turismo de aventura, una
oferta que pocos de sus competidores pueden emular. Travesías en
camionetas, cabalgatas y paseos en carretas por el bosque,
sandboard, jet ski. Habrá para todos los gustos.
A poco
más de un mes del inicio de la temporada, los operadores turísticos
se ilusionan con mejorar los resultados de los dos últimos
veranos, que fueron los más flojos de la década.
Este año
habrá mejor infraestructura, más actividades para los visitantes
y, además, la ciudad siguió creciendo.
Entre
las novedades, las casas del centro de la ciudad tendrán gas
natural. Los operarios de la empresa que brindará el servicio se
mezclan en la ciudad con los obreros que pintan y ponen a punto
para el verano los comercios, las veredas y los balnearios.
El 2000
recibirá a los turistas con 500 casas nuevas y más de 600 plazas
de hotel, que se suman 12.000 que ya existían. También volverán
a instalarse los cuatro paradores para usuarios de camionetas 4 x
4 en la zona comprendida entre los balnearios La Frontera y
Montecarlo.
Los
pinamarenses quieren que este año se reduzcan a la mínima
expresión los robos. Se volverá a instrumentar el mismo
operativo del último verano -ideado por los vecinos-, pero con más
patrullaje en el centro y en las playas, para lo cual habrá nueve
motos de arena.
Una
dotación de 150 efectivos llegará en diciembre a Pinamar y se
pondrá al mando del comisario local.