Enfermedades
parasitarias
Parásitos internos
Ascaridiasis
Uno de los parásitos
intestinales más comunes de la avicultura (Ascaridia galli)
aparece en pollos y pavos. Las formas adultas miden entre 4 a
7,5 centímetros de largo y tienen el grosor de un lápiz, así
que se pueden ver fácilmente a simple vista.
Las aves muy infectadas pueden
mostrar decaimiento, emaciación y diarrea. El daño primario
reside en la reducción de la eficiencia alimenticia, pero también
se han observado muertes en los casos más severos.
Los pollos de 3 a 4 meses de edad
muestran resistencia a la infección.
Ocasionalmente, se han encontrado
especímenes del parásito en los huevos de las aves. La
lombriz, aparentemente, se desplaza del intestino al oviducto y,
de esta manera, queda incluida en el contenido del huevo cuando
éste se forma.
La historia de la vida de este
parásito es sencilla y directa. Las hembras ponen huevos de cáscara
gruesa y pesada en el intestino que salen con las heces. En el
huevo se desarrolla un pequeño embrión que no aflora
inmediatamente. La larva, dentro del huevo, alcanza su estado
infectivo a las 2 ó 3 semanas. Los huevos embrionados son muy
resistentes y, en condiciones de laboratorio, pueden vivir unos
2 años.
Sin embargo, en condiciones
normales, probablemente muy pocos viven más de un año. Los
desinfectantes y otros agentes de limpieza no matan a los huevos
en las condiciones que reinan en la granja. Las aves se infectan
comiéndose los huevos que han llegado al estado infectivo.
Los productos disponibles
solamente eliminan a los parásitos adultos. La forma inmadura
es, probablemente, la que produce los daños más severos. El
tratamiento preferido es la piperacina, de la que se producen
muchas formas, todas efectivas si se administran correctamente.
La piperacina solamente es efectiva para el tratamiento de este
parásito y no tiene efecto contra otros parásitos internos de
las aves. Siga cuidadosamente las instrucciones del fabricante.
El parásito puede ser controlado
con una estricta limpieza. Si las aves están confinadas, limpie
todo el galpón con extremo cuidado antes de introducir un nuevo
lote de aves. Segréguelas por grupos etáreos, con especial
cuidado en la higiene que se usa con las aves más jóvenes.
Lombrices
cecales
Este parásito (Heterakis
gallinae) se encuentra en el ciego de pollos, pavos y otras
aves. Son lombrices pequeñas, blancas, que miden hasta 12 milímetros
de largo.
Aparentemente,
este parásito no afecta seriamente la salud del ave. Por lo
menos no se pueden achacar patologías o síntomas marcados a su
presencia. Su importancia reside en que se le ha culpado de ser
vector del Histomonas meleagridis, el agente que produce
la histomoniasis. Este protozoario, aparentemente, es
transportado en los huevos de la lombriz cecal y se trasmite de
un ave a otra a través de estos huevos.
El ciclo de vida
del parásito es similar al de la lombriz común. Los huevos son
producidos en el ciego del ave y salen con las heces. Alcanzan
su forma infectiva en un lapso de 2 semanas, que puede ser mayor
si el tiempo está frío. Los huevos son muy resistentes a las
condiciones ambientales y permanecerán viables por largos períodos.
La lombriz cecal
puede ser tratada efectivamente con fenbendazole. Como la
lombriz misma no produce daños visibles y los huevos viven
mucho tiempo, es aconsejable y necesario mantener separados a
los pollos y pavos para prevenir la diseminación de la
histomoniasis.
Capillaria
Existen varias
especies de Capillaria que viven en las aves. La Capillaria
annulata y la Capillaria contorta aparecen en el
buche y en el esófago. Allí pueden producir el engrosamiento e
inflamación de las mucosas y, ocasionalmente, lesiones severas
en pavos y aves de caza.
En el tracto
intestinal inferior pueden haber diferentes especies, pero
generalmente la más prevalente es la Capillaria opsinata.
El ciclo de vida de este parásito es directo. Las lombrices
adultas pueden introducirse en la mucosa intestinal. Ponen los
huevos que salen con las heces. Después de la fase embrionaria,
que toma de 6 a 8 días, los huevos son infectivos a cualquier
ave que los consuma.
Los daños más
severos ocurren a las 2 semanas después de la infección. Los
parásitos suelen producir severas inflamaciones y, a veces,
producen hemorragias. La erosión de la mucosa intestinal puede
ser muy extensa, lo que provoca la muerte. Estos parásitos
pueden ser un problema en los galpones que usan camas muy
profundas. Las infecciones severas pueden causar reducción del
crecimiento, de la producción de huevos y de la fertilidad.
Si los parásitos
están presentes en gran cantidad es fácil encontrarlos en la
necropsia. No es fácil observar los huevos en los excrementos,
debido a su tamaño muy pequeño y el momento en que ocurre la
infección.
Como muchas veces
no hay tratamiento contra capillaria, el mejor control se logra
por medio de medidas preventivas. Algunas drogas, administradas
en bajas dosis pueden servir para disminuir altos niveles de
infección en granjas donde haya problemas.
Las aves deben
criarse sobre alambre para evitar infecciones. Algunas especies
de capillaria tienen un ciclo de vida indirecto, y habrá que
dirigir las medidas de control hacia los huéspedes
intermediarios. Se puede usar higromicina en el control, y
resulta valiosa la adición de Vitamina A.
Tenias
Las tenias
son unas lombrices aplanadas, en forma de cinta, compuestas de
numerosos segmentos o divisiones. Pueden variar de tamaño desde
muy pequeñas a varios centímetros de largo. La cabeza, o
extremo anterior, es mucho más pequeña que el resto del
cuerpo.
Como las tenias
pueden ser tan pequeñas, muchas veces se necesita una inspección
muy cuidadosa para encontrarlas. Puede ser útil para ello abrir
una pequeña porción del intestino y colocarla en agua.
La patología, o
los daños que las tenias producen en las aves domésticas son
controversiales. En las aves jóvenes, una fuerte infección
resulta en reducción de la eficiencia y disminución del
crecimiento. Las aves jóvenes son afectadas más severamente
que las adultas.
Todas las tenias
avícolas aparentemente pasan parte de su vida en huéspedes
intermediarios, y las aves se infectan comiéndose a estos huéspedes.
Entre éstos tenemos caracoles, babosas, escarabajos, hormigas,
saltamontes, lombrices de tierra, moscas caseras y otros. El huésped
intermediario se infecta comiendo los huevos de la tenia que son
expulsados en las heces de las aves.
Aunque se usan
muchos productos para eliminar la tenia de las aves, muchos son
de dudosa efectividad. En general, la tenia se controla con
mayor efectividad evitando que las aves consuman los huéspedes
intermediarios. Las infecciones de tenias pueden controlarse
tratando regularmente a las aves con fenbendazol y levamisol.
Nemátodos
El syngamus
trachea es una lombriz roja, redonda, que se adhiere a la tráquea
de las aves y causa una enfermedad llamada "boqueo".
Este nombre se refiere a la respiración con el pico abierto
característico de las aves infectadas con la lombriz.
Las aves
severamente infectadas emiten una especie de gruñido debido a
la dificultad para respirar y muchas mueren asfixiadas. Las
lombrices pueden llegar fácilmente a bloquear la tráquea, así
que son especialmente dañinas para las aves jóvenes.
A este nemátodo
se la llama a veces "lombriz roja" por ser de este
color. Las hembras y los machos quedan unidos en permanente
copulación de tal forma que parecen la letra Y. La hembra es más
grande que el macho y mide entre 5 y 25 mm de largo. El macho
puede llegar a medir 5 mm. Ambos sexos se adhieren con la boca a
la mucosa de la tráquea y se reúnen en suficiente cantidad
como para dificultar la respiración.
El ciclo de vida
del parásito es similar al de la lombriz cecal, puede ser
transmitido cuando las aves ingieren huevos de lombriz que
contienen ya embriones o lombrices de tierra que contienen
larvas del nemátodo. La hembra pone los huevos en la tráquea,
el ave tose los huevos, se los traga y los expulsa en las
heces.
Entre 8 a 14 días
los huevos se transforman en embriones y se tornan infectivos
cuando los ingieren otras aves o lombrices de tierra. Estas, los
caracoles y las babosas sirven de huéspedes intermediarios
primarios para el nemátodo. Los que infectan a lombrices de
tierra permanecen viables cuatro años y medio mientras que los
que infectan a caracoles y babosas son infectivos por un año.
Después de haber sido consumidos por el ave, nacen las larvas
en el intestino y migran hacia la tráquea y pulmones.
Los nemátodos
infectan pollos, pavos, gallinas de Guinea, faisanes y,
probablemente, otras aves. Las aves de caza jóvenes, criadas en
corrales con piso de tierra infectado corren gran peligro. Se
logra cierto control o disminución de la infección alternando
el uso de los galpones un año si y uno no y/o usandolos por un
año con un mismo lote de aves.
Desinfectar el
suelo del galpón al final de la temporada de engorde también
ayuda a disminuir la infestación residual. Es posible el
tratamiento del suelo para eliminar totalmente los nemátodos,
caracoles y babosas, pero el costo suele ser prohibitivo.
La mejor manera
de evitarlos es administrando un antiparasitario con intervalos
de quince a treinta días, o incluir continuamente un producto a
bajas dosis, comenzando quince días después de haber
introducido las aves en el galpón infectado. Un producto que
resulta efectivo para eliminarlos es el fenbendazol.
Parasitos
externos
Acaros
Todas las aves
son susceptibles a los ácaros, algunos de los cuales son
chupadores de sangre, mientras otros penetran en la piel o viven
en las plumas. Los hay que viven en las vías respiratorias y en
los pulmones, el hígado y otros órganos internos.
Los ácaros que
atacan a las aves producen retraso en el crecimiento, reducción
en la producción de huevos, disminución de la vitalidad,
plumaje dañado y llegan a ocasionar la muerte. La mayoría de
las lesiones consisten en una irritación constante y pérdida
de sangre, no es aparente sin un examen cuidadoso.
Muy importante
para el productor de aves es el ácaro Ornithonyssus
sylviarum una frecuente y seria plaga de las aves. Una
fuerte infestación resulta en baja condición de las aves y
producción de huevos, así como también costras en la piel.
Este ácaro permanece en el ave y le causa más daño que
ninguna otra especie.
No abandona a su
huésped, como lo hacen muchas otras especies de ácaros, y se
puede observar en gran número durante el día. Prefiere las
plumas que están bajo la cloaca y rodeando la cola, pero se le
puede encontrar por todo el cuerpo. Es extremadamente pequeño y
para verlo puede requerirse una lupa o un microscopio.
La hembra pone
sus huevos en las plumas, donde los ácaros jóvenes completan
su desarrollo sin abandonar su huésped. Como permanece sobre éste
la mayor parte del tiempo, es necesario tratar a las aves para
eliminarlo.
El ácaro común
de los pollos (Dermanyssus gallinae) es el ácaro que se
encuentra con mayor frecuencia en todo tipo de aves. Es un
chupador de sangre y cuando está presente en grandes
cantidades, la pérdida de sangre y la irritación pueden ser
suficientes como para causar anemia. La producción de huevos
disminuye seriamente.
Este ácaro se
alimenta por la noche y generalmente permanece escondido durante
el día en grietas y ranuras. Ataca a las aves en la noche
mientras están en reposo, pero cuando la infestación es grave,
se mantienen en las aves durante el día. Alrededor de un día
después de haberse alimentado, la hembra pone sus huevos en las
grietas y hendiduras del galpón.
Los huevos
eclosionan y los ácaros se desarrollan hasta adultos en una
semana más o menos. En tiempo frío, el ciclo es más lento. El
galpón permanece infestado 4 ó 5 meses después de haber sido
desocupado.
Como el ácaro
también se alimenta en aves silvestres, éstas pueden ser
responsables de expandir la infestación. Pero es mucho más
probable que la diseminación de ácaros ocurra por el uso de
instalaciones contaminadas. También son importantes los
portadores humanos. Como estos ácaros no permanecen en las aves
durante el día, aplique los tratamientos a los galpones y
equipos en esas horas, al mismo tiempo que a las aves.
El ácaro Knemidocoptes
mutans vive debajo de las escamas de las piernas y patas
de las aves. También puede adherirse a las crestas y barbillas.
Produce el engrosamiento de las escamas de las piernas y patas
que causa la impresión de que las escamas crecen directamente
hacia fuera en vez de descansar planas sobre la piel. Pasa todo
su ciclo de vida en el ave y se disemina por contacto directo.
El ácaro
desplumador (Knemidocoptes laevis, variedad gallinae)
produce severa irritación excavando en la piel cerca de las
bases de las plumas, causando que estas se desprendan o se
rompan. El ácaro es apenas visible a simple vista y se puede
encontrar en los folículos de la base de las plumas. Ellos se
arrastran todo el tiempo alrededor de las aves infestadas,
expandiendo la infestación de un ave a otra.
El tratamiento más
efectivo para todas las especies de ácaros es la inspección
regular y un buen programa de rociado, tanto de las aves como de
las instalaciones. Una solución apropiada de permethrin,
aplicada sobre las aves, eliminará a todos los ácaros que las
infestan. El rociado de las instalaciones logrará la destrucción
de los ácaros escondidos en grietas y ranuras. El tratamiento
debe repetirse cada uno o dos meses, o siempre que se detecte la
presencia de ácaros.
Piojos
El efecto
primario que causan los piojos en sus huéspedes es la irritación.
Las aves se sienten inquietas y no duermen ni comen bien. Pueden
lesionarse a sí mismas o dañarse las plumas picoteando o rascándose
las áreas irritadas. El peso corporal y la producción de
huevos pueden disminuir.
Todos los piojos
que infectan a las aves domésticas y silvestres son del tipo
masticador. Los ácaros pueden ser confundidos con los piojos,
pero los primeros son chupadores de sangre. En general, cada
especie de piojo está confinada a un tipo particular de ave,
aunque algunos pueden pasarse de uno a otro si están íntimamente
asociados. Los pollos están infestados con una o más de siete
diferentes especies y los pavos tienen tres especies comunes.
Todas las
especies de piojos de los pollos tienen algunos hábitos en común.
Todos viven continuamente en las plumas de los huéspedes y
mueren pronto si se les extrae. Los huevos están adheridos a
las plumas. Los jóvenes se parecen a los adultos excepto por su
color y tamaño. Prefieren vivir en sitios específicos de su huésped
lo que origina los nombres comunes con que se les denomina.
En general, el
periodo de incubación de los huevos del piojo es de cuatro a
siete días y el desarrollo de éstos desde que nacen hasta que
llegan a adultos requiere unos veintiun días. El apareamiento
tiene lugar sobre el ave, y la postura comienza de dos a tres días
después de que los piojos maduran. El número de huevos que
pone cada hembra varía probablemente entre cincuenta y
trescientos.
Como su nombre
sugiere, el piojo de la cabeza (Cuclotogaster heterographa)
aparece principalmente en la cabeza, aunque ocasionalmente también
se puede encontrar en el cuello y en otras partes. Generalmente
se localiza cerca de la piel, en el plumón o en la base de las
plumas, en la parte alta de la cabeza y debajo del pico. La
cabeza del piojo se encuentra, a veces, tan cerca de la piel que
el avicultor puede pensar que está pegado a ella, chupando
sangre.
Aunque no chupa
sangre, el piojo de la cabeza es muy irritante y es considerado
en la lista como el más molesto para pollos y pavos jóvenes.
Los pollitos muy infestados se ponen mustios y débiles y pueden
morirse antes de llegar a un mes de edad. Cuando los pollos están
bien emplumados, disminuyen los piojos de la cabeza, pero pueden
aumentar de nuevo cuando las aves llegan a la madurez.
Este piojo es
oblongo, grisáceo y mide como dos milímetros y medio. Los
huevos, de color blanco perlado están adheridos uno a uno al
plumón o a la base de las cortas plumas de la cabeza.
Eclosionan a los cinco días y nacen piojillos diminutos, pálidos
y translucidos, de forma parecida a la de los adultos.
El piojo del
cuerpo (Menacanthus stramineus) de los pollos prefiere
permanecer en la piel en lugar de las plumas. Elige partes del
cuerpo que no tienen muchas plumas, como la zona debajo de la
cloaca. Cuando las infestaciones son fuertes, se le puede
encontrar en la pechuga, debajo de las alas y en otras partes
del cuerpo, incluyendo la cabeza.
Cuando se apartan
las plumas, se ve a los piojos del cuerpo, de color pajizo,
corriendo rápidamente por la piel para ocultarse de nuevo. Sus
huevos son depositados en grupos cerca de la base de las plumas
pequeñas, especialmente debajo de la cloaca o, en las aves
pequeñas, frecuentemente en la cabeza y garganta. Los huevos
eclosionan en una semana y alcanzan la madurez en veinte días.
Este es el piojo
que infesta más frecuentemente a los pollos en crecimiento.
Cuando está presente en grandes cantidades, la piel se irrita
mucho y pueden aparecer cicatrices, especialmente bajo la
cloaca.
El piojo del cañón
de las plumas o piojo pequeño (Menopon gallinae) se
parece al piojo del cuerpo, pero es más pequeño. Tiene la
costumbre de descansar sobre el cañón de las plumas de los
pollos, donde se le puede ver corriendo apresuradamente hacia el
cuerpo cuando se apartan las plumas súbitamente. Hay veces que
se ve tanto como una docena de piojos corriendo astil abajo.
Ya que este piojo
aparentemente se alimenta con partes de las plumas, se le
encuentra en cantidades limitadas en pavos, gallinas de guinea y
patos, que vivan en íntima proximidad con los pollos. No
infesta a las aves jóvenes hasta que no están bien emplumadas.
Las mismas
medidas de control que se usan para eliminar los ácaros sirven
para tratar a los piojos. Tiene mayor importancia aplicar
insecticidas sobre el cuerpo del ave que sobre las
instalaciones.
Garrapatas
Las garrapatas avícolas
(Argas persicus), en infestaciones severas puede ser un
serio parásito de las instalaciones. La garrapata es un
chupador de sangre, y cuando está presente en grandes
cantidades, las aves se debilitan, disminuyen su producción de
huevos, se emacian y pueden morir. La garrapata es sumamente
resistente. Se mantienen vivas, sin alimento, por más de tres años
y comen cualquier cosa.
Las garrapatas
pasan la mayor parte de su vida en las grietas y escondrijos, de
los que emergen en la noche para buscar sangre. El apareamiento
tiene lugar en áreas escondidas. Unos días después de haberse
alimentado, la hembra pone los huevos en grupos. Cuando hace
calor, los huevos eclosionan en catorce días. En tiempo frío,
pueden tomar hasta tres meses.
Las larvas se
arrastran por los alrededores hasta que encuentran un huésped.
Se mantienen unidas al ave por tres a diez días, después la
abandonan y encuentran un nuevo escondite y mudan antes de salir
a buscar nueva comida. Esto se continúa con mudas y comidas
(sangre) adicionales.
Es difícil
erradicar a las garrapatas y los métodos que se utilicen han de
aplicarse cuidadosamente. No es necesario tratar a las aves,
pero los galpones y sus alrededores deben ser tratados a fondo.
Control
de parásitos externos
Hay muchos
insecticidas disponibles para ayudar a combatir los parásitos
externos. El insecticida de amplio espectro más efectivo es la
permetrina. Tiene un efecto residual importante, lo que lo hace
ideal para el tratamiento de instalaciones y equipos. En
concentraciones reducidas puede aplicarse al ave. Siga todas las
recomendaciones del fabricante.
Fuente:
Revista Avícola.
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